Seguidores

miércoles, 27 de julio de 2011

Toda la noche hasta el amanecer.

Oscuridad. Suspiros repentinos. Manos que se cruzan, divertidas, ligeras. Desabotonan, buscan, encuentran. Una caricia, un beso. Y otro beso y una camisa que resbala. Un cinturón que se abre. Una cremallera que baja lentamente. Un salto. Feliz de estar allí. Cabellos alborotados y camas incómodas. Bocas en busca de mordisco. Y dos corazones acelerados que no frenan, que están a punto de chocar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario